El derecho al honor recibe también otras denominaciones, tales
como:
Pese al lugar asignado en los textos legales y a que muchos autores así lo sostienen, el derecho al honor no se puede encerrar en el genérico derecho a la intimidad, derecho con el que tiene ciertamente estrechas relaciones y no pocas coincidencias, sino en el derecho a la integridad moral.