C1.9.6. EDUCACION SOBRE EL DERECHO
Para la educación sobre este derecho en el ámbito escolar
se proponen dos tipos de estrategias: la exposición de casos prácticos
y testimonios reales, y el estudio, análisis y preparación
de testamentos vitales.
Mediante los casos prácticos (preferentemente reales), se pretende
conseguir varios objetivos. En primer lugar, sensibilizar sobre la problemática
del final de la vida desde el punto de vista de los Derechos Humanos. Este
es un terreno relativamente novedoso, y es importante que la necesidad
de tratar el derecho a morir con dignidad sea percibida por los estudiantes
y asumida con naturalidad.
En segundo término, la exposición de casos prácticos
permitirá comprender:
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La importancia de conocer perfectamente los hechos biológicos, para
poder formular un juicio válido. No existen dos casos en el que
la totalidad de tales hechos sean iguales.
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La necesidad de conocer y comprender los hechos no biológicos, como
los valores y creencias del paciente, sus relaciones de familia y el papel
de ésta en su vida, y las diferentes actitudes dentro del seno familiar.
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La exposición de casos prácticos permitirá comprender
mejor los sentimientos, razones y valores que pueden animar en cada caso
a las partes implicadas en las decisiones sobre el final de la vida. Esas
razones, sentimientos y valores van referidos:
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A los médicos y personal de enfermería, a su compromiso a
veces sin matices con la vida, cualquiera sea la forma en que ella se manifieste.
Igualmente, la actuación del personal sanitario estará muy
condicionada por una tradición (y unas demandas sociales) que les
obligan a actuar siempre (a "hacer todo lo que esté a su alcance"),
más allá del éxito que pueda razonablemente esperarse.
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A la familia, en la que suele imperar el deseo apremiante de que termine
el sufrimiento y la degradación de un ser querido por el que nada
puede hacerse. Otras veces es la propia familia la que se opone a la suspensión
del tratamiento a causa de los muy humanos sentimientos de dolor ante la
pérdida de un ser querido, o se niegan a admitir una muerte irremediable
e inminente.
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Por último, el comentario y análisis de casos prácticos
permitirá comprender que, aunque pueda haber desacuerdos entre ellos,
el equipo médico y la familia no son enemigos, sino personas en
situaciones extremas, en donde la toma de decisiones resulta particularmente
compleja, y en donde se mezclan elementos éticos, técnicos,
jurídicos y, siempre a tener en cuenta, elementos afectivos.
Mediante el estudio, análisis y preparación de testamentos
vitales se pretende, además de sensibilizar sobre el derecho y facilitar
que se lo asuma con naturalidad, hacer notar la responsabilidad individual
que a cada uno le cabe por hacerse respetar en su derecho a morir con dignidad.
También se trata de concienciar sobre la importancia de facilitar
la decisión, ante el caso -bastante probable en nuestros tiempos-
de que ella sea necesaria.
Finalmente, el estudio de testamentos vitales permite poner de manifiesto
las variaciones individuales de tales textos, que no tienen por qué
ajustarse a un modelo único, sino que deben recoger las diferentes
sensibilidades y creencias. Así, por ejemplo, algunos pueden desear
que el sacerdote o el confesor participen en la decisión de suspender
el tratamiento, otros pueden expresamente negarles toda ingerencia, etcétera.
En el ámbito de la enseñanza universitaria pueden proponerse
como actividades a realizar las referidas en el apartado referente a la
metodología de la enseñanza de los Derechos Humanos.