Al igual que en Europa, es a partir de la segunda guerra mundial cuando se empieza a tomar conciencia en el continente americano de la necesidad de proteger los Derechos Humanos en su propio ámbito territorial regional.
El primer paso lo da el Acta de Chapultepec, firmada el 6 de Marzo de 1945, en la que además de afirmar la necesidad de solucionar por medios pacíficos las diferencias existentes entre los diversos Estados americanos, se hace alusión al deseo de ir construyendo la justicia y la libertad en el ámbito continental americano.
El paso decisivo será la Carta de Bogotá, adaptada en la Novena Conferencia Panamericana, el 30 de Abril de 1948, la misma que aprobó la Declaración Americana de Derechos y Deberes del Hombre, por la que se crea la Organización de Estados Americanos (OEA).
El mayor inconveniente para la garantía efectiva de los Derechos Humanos en la OEA radica en las condiciones económicas, sociales y culturales en que se encuentra América Latina. Toda consideración sobre los Derechos Humanos en esa región debe partir de esa consideración:
En un mundo caracterizado por la miseria, la enfermedad,la explotación y la injusticia, podrán "existir" Derechos Humanos reconocidos en unas normas jurídicas, pero no serán nunca una verdad real, no solamente normativa o nominal, si no se dan determinadas condiciones económicas, sociales, políticas y culturales(27).
Como causas fundamentales de la situación que actualmente atraviesa América Latina pueden señalarse, entre otras(28):
El proceso de generalización de las dictaduras, pasando de ser regímenes episódicos y circunstanciales (meras formas de poder fáctico), a instituciones con aspiración de permanencia y de contenido ideológico, fundadas casi siempre en el poder militar.
El apoyo a esas dictaduras, e incluso el decisivo impulso para su instauración,por parte del gobierno de los Estados Unidos de América del Norte, en defensa de sus intereses imperialistas.
La instauración del "terrorismo de Estado" por parte de esas dictaduras, como forma" normal" y habitual de actuación desde el poder.
Basar ese terrorismo de Estado en la mal llamada "doctrina de la seguridad nacional", que hizo de la violación de los Derechos Humanos en América Latina un fenómeno masivo y la expresión sistemática de una conducta política.
La actuación decisiva del ejército como elemento ejecutor de esa acción de "terrorismo de Estado" y de la" doctrina de la seguridad nacional".
No obstante, hay que señalar de forma optimista como, pese a todos los inconvenientes, se va abriendo paso un gradual e irreversible avance en el ámbito regional americano, tanto desde el punto de vista normativo, como desde la perspectiva política, económico y social, en la medida en que los regímenes dictatoriales están en regresión en el continente latinoamericano(29).