La Carta de las Naciones Unidas ya contenía como uno de sus objetivos primordiales el mantenimiento de la paz y la seguridad en todo el mundo, el desarrollo de relaciones de amistad entre las naciones, y la consecución de la cooperación internacional en la promoción y el respeto por los derechos fundamentales, pero a medida que ha transcurrido el tiempo se ha reafirmado la idea de que el disfrute de derechos económicos, sociales y culturales está ligado al disfrute de derechos civiles y políticos.
Si entendemos por desarrollo al proceso por el cual se amplían las oportunidades del ser humano, tenemos que entender que estas son infinitas y seguramente se modificarán con el tiempo. Pero aún así, podemos señalar a cuatro como esenciales o sea que se mantienen a través del tiempo. Estas son disfrutar de una vida prolongada y saludable, adquirir conocimientos, tener acceso a los recursos necesarios para lograr calidad de vida y también un elemento decisivo, el desarrollo civil y político.
La responsabilidad de los Estados sin excepción es crear y alentar la generación de espacios donde sea posible en forma sostenida y participativa incrementar formas de desarrollo propias y creativas donde cada hombre y cada pueblo sean los verdaderos protagonistas.
Mas de la mitad de la población mundial se encuentra habitando países en vías de desarrollo, sufriendo la pobreza, la ignorancia, llevando una existencia subhumana; estos y otros temas pueden sugerirse a fin de alentar una mayor toma de conciencia, debido a que el problema no pasa hoy tanto por el reconocimiento internacional, sino por la violación sistemática de los mismos. Es fundamental formar a las futuras generaciones en el conocimiento y sensibilización de los problemas del tercer mundo, así como en el progresivo incremento de la Solidaridad.
En la época actual se puede hablar de la violencia económica como una categoría específica de la violencia que puede ser ejercida por algunos seres humanos sobre otros. Se trata del poder coacciónante que ejercen los países ricos sobre los países pobres, del poder de las clases dominantes sobre las clases dominadas.(11)